Sumérgete en mi cuerpo
Como navegante perdido,
Sé el conquistador de estos peñascos,
Montañas homogéneas en mi pecho.
Navega por las olas
De este mar enredadizo.
Embriágate con los aromas,
De este paraíso prohibido.
Como imán, sin más remedio, ancla en sus orillas.
Sáciate de esta piel,
Cubierta de hiedra,
Saborea de par en par
Estos labios en extravío.
Refúgiate en el valle
De mis abandonadas caderas,
Adéntrate en las entrañas,
En las profundidades de esta selva.
Descubre, sin mesura,
Los tesoros de esa cueva
Que espera por ti, pirata,
Ladrón impío de mis riquezas.
Ubica con tu brújula
Mi tesoro escondido,
Excava en lo más profundo
En los sin fines de esta tierra.
Evadne Dos Torres
©Copyright